“Que los alumnos sean capaces de poner en escena las capacidades técnicas y artísticas aprendidas en clase” es, según la directora académica Pepa Sánchez, uno de los objetivos del plan de estudios de la Fundación Cristina Heeren. Y comienzan a alcanzarlo apenas terminado el primer trimestre del Curso Flamenco Anual 2018/2019. Tras los exámenes, los estudiantes de las tres especialidades –CanteBaile y Guitarra– se tomaron unos días de ensayos para pulir los cantes, bailes y toques estudiados entre septiembre y diciembre que serían parte del repertorio de las dos galas de Navidad en el teatro del centro. 

El jueves 20 de diciembre tuvo lugar la primera serie de actuaciones, abierta por una soleá de Pedro Sierra interpretada por siete alumnos de 2º de Guitarra. También hubo una muestra de Guitarra de Acompañamiento al Baile, con los alumnos de 3º de Guitarra de Pedro Sánchez para el baile de Beatriz Rivero y los de 2º de Guitarra de Paco Cortés para el cante de Marcos Martínez. Por tientos se unieron los alumnos de nivel intermedio de María José Pérez y Paco Cortés, estrenándose las voces de Marta Aguilar, Ana Navas y Estefanía Salvatella. El baile grupal lució con dos elaboradas coreografías de los maestros Milagros Menjíbar, que retomó la serrana con alumnas de 3º de Baile; y Javier Barón con unas fotogénicas cantiñas para los alumnos y alumnas de 2º de Baile. Aunque los estudiantes que más aplausos y jaleos levantaron entre sus compañeros fueron los de primer curso. Con sólo tres meses de clases, lograron compartir los primeros frutos de su esfuerzo. Por fandangos cantaron Ebla Sadek y Claudia Vega, alumnas de Manuel Romero, con las guitarras de seis discípulos de Carmelo Picón.

Aún fue más diverso el programa de la segunda gala, celebrada el viernes 21 de diciembre. Los diálogos entre alumnos de las tres especialidades -cante, baile y guitarra- fueron la nota dominante. Y así comenzó la representación, con una seguiría compartida entre tres alumnos de último curso: la cantaora Rosa Lineros, la bailaora Paula Salazar (becada por Acciona en Talento Flamenco 2018) y el guitarrista Miguel Calatayud, guiados por los maestros Juan José Amador, El Choro y Pedro Sánchez. Y lo mismo sucedió con los estudiantes de 2º Curso que montaron sus propias cantiñas como práctica de la asignatura “Tablao”: la bailaora Lisa Senaux, las cantaoras Ana Lorenzo y Silvia Ortega, y los guitarristas Juan Manuel Oviedo y Javier Gómez. El cante salió delante con Alba Martos por rondeña, Antonio Mena por soleá por bujerías y Ana Lorenzo por malagueñas, alumnos adiestrados por José de la Tomasa que fueron acompañados al toque por Pedro Carro y Jaime Lama, Miguel Calatayud y Eduardo Muñoz, y Martín Fayos (becado por Acciona en Talento Flamenco 2018), respectivamente, pupilos de Pedro Sierra.

También hubo una demostración de cante para baile de los alumnos de Juan José Amador: Rosa Lineros, Ana Lorenzo y Silvia Ortega cantaron para el baile por serrana de la auxiliar María Martha Rodríguez, con el toque de Ángel Doblado. También hubo tiempo para la escucha de la guitarra solista, con un zapateado de Niño de Pura, así como una segunda entrega, a trío, de la coreografía por serranas de Milagros Menjíbar. De nuevo fueron estudiantes de primer curso los más arropados en su actuación, en este caso, las alumnas de Carmelilla Montoya con unas vivas alegrías en las que contaron con la colaboración de María Martha, las palmas y el cante de la maestra trianera, de Carlos Guillén y de Calerito, y el toque de Vahan Davtyan. La guinda de las galas fue la representación solista de las cantiñas montadas por Rubén Olmo como profesor invitado, a cargo del joven bailaor Juan Tomás de la Molía, personificación del espíritu de los Concursos Talento Flamenco, que transmitió su vibrante energía a toda la escuela de cara a las vacaciones de Navidad. A la celebración posterior en el patio contribuyó el cercano Bar Santa Ana con un potaje tradicional que alumnos, profesores y staff disfrutaron juntos.