Andaltec Centro Tecnológico y la empresa marteña Proinsur ya han finalizado el proyecto Avasound, que ha permitido el desarrollo de un innovador sistema acústico para vehículos eléctricos que aún no existe en el mercado. El proyecto de I+D, que cuenta con el apoyo del Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), ha creado un dispositivo innovador que aúna tres funciones: Sistema Acústico de Alerta para Vehículos (AVAS), avisador acústico y elemento acústico de ayuda a la conducción. El AVAS es un sistema que debe activarse cuando el vehículo circule en sentido contrario de la marcha a velocidades entre 0 y 20 kilómetros por hora, con un sonido artificial que debe ser continuo y similar al ruido generado por un vehículo de combustión interna. Por su parte, el avisador acústico o claxon es un sistema activado por el conductor que se utiliza para advertir de forma sonora sobre la presencia del vehículo. Finalmente, el elemento acústico de ayuda a la conducción es un sistema cuya finalidad es alertar al conductor de una situación anómala en el estado del vehículo.
Así, la empresa da respuesta a la normativa de la Unión Europea, que obliga desde el 1 de julio de 2021 a que todos los vehículos eléctricos, cuyo funcionamiento es muy silencioso, emitan un sonido cuando circulan a bajas velocidades para a avisar a los peatones de su presencia.
Juan Carlos García, responsable del departamento de Nuevos Proyectos de Proinsur, se muestra muy satisfecho con el resultado del proyecto. Este dispositivo es pionero a nivel mundial, pues actualmente existen AVAS, avisadores acústicos y elementos acústicos de ayuda a la conducción por separado, pero no integrados en un único dispositivo. “Los ensayos de laboratorio y las pruebas de campo han finalizado de forma muy positiva, por lo que ya disponemos de prototipos plenamente funcionales. También hay que destacar que el tamaño del dispositivo final es menor del planteado inicialmente en lo referente a la electrónica”, indica.
Ahora, Proinsur se dispone a sacar el sistema al mercado, donde existe una gran demanda de este tipo de dispositivos en plena eclosión de la demanda y producción de vehículos eléctricos a nivel mundial. Juan Carlos García pone de relieve la colaboración con Andaltec en este proyecto, que ha unido la experiencia industrial en el sector de la Automoción de Proinsur con la innovación y la capacidad para realización de ensayos del centro tecnológico.
El proceso para el desarrollo de este dispositivo acústico ha sido complejo y ha necesitado superar muchos retos tecnológicos. El aparato debe estar colocado en el exterior de la parte delantera del automóvil, por lo que ha tenido que afrontar exigentes pruebas de durabilidad impuestos por la propia norma europea y por los fabricantes de vehículos.
Además, el sonido que debe producir al circular a baja velocidad no debe sobrepasar los 65 decibelios y tiene que desconectarse cuando el vehículo supere una velocidad de 20 kilómetros por hora. El proyecto presenta una importante complejidad, ya que el tono emitido debe cambiar de frecuencia según acelera el motor, por lo que conlleva el diseño y la implantación de un sistema digital de control para desarrollar esta función. Del mismo modo, la normativa también obliga a que los vehículos eléctricos incorporen un sonido específico que avisa cuando circulan marcha atrás.
Debido a la complejidad del proyecto, han estado implicadas las Áreas de Ingeniería, Proyectos, Laboratorio y Electrónica de Andaltec, que han ofrecido un servicio integral que ha permitido culminar con éxito los trabajos.
Jesús Castillo, responsable del proyecto por parte de Andaltec, explica que este innovador sistema acústico presenta numerosas ventajas, ya que permite unificar tres funciones en un único dispositivo: avisador, generador de sonido a bajas velocidades y aviso acústico de marcha atrás. También permite eliminar el claxon convencional, lo que supone un ahorro para el fabricante, a la vez que se aligera el peso del automóvil, una de las prioridades de los vehículos eléctricos para reducir el consumo energético y alargar la autonomía. “Este proyecto demuestra lo potente que puede ser la colaboración entre los centros tecnológicos y las empresas, ya que Proinsur tiene ahora un producto que es pionero a nivel mundial. Esto le va a permitir abrir una nueva línea de negocio y poder acceder a nuevos nichos de mercado y empresas del sector de la Automoción”, sostiene.
Proinsur
Procesos Industriales del Sur, que es patrono fundador de la Fundación Andaltec, es una empresa centrada en la transformación de termoplásticos para producir distintas piezas destinadas al sector de la automoción. Cuenta con dos plantas de producción ubicadas en Martos y en la Zona Franca de Tánger (Marruecos), que suman cerca de 25.000 metros cuadrados. Proinsur se encargará de la fabricación y distribución de este innovador dispositivo, que refleja la decidida apuesta por el I+D+i que realiza esta empresa. Las instalaciones de Proinsur están equipadas con todos los medios necesarios para la inyección de los materiales plásticos, el ensamblaje de los componentes y el control de calidad de los componentes y productos.