El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), dependiente de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, ha presentado el resultado de la intervención en las dos esculturas romanas de bronce conocidas como Efebos de Pedro Abad, en el marco de la encomienda de I+D y conservación realizada para el periodo 2020-2024 por la Junta de Andalucía.

Los efebos de Pedro Abad han quedado depositados de forma definitiva esta semana en el Museo Arqueológico de Córdoba, donde se prevé su exposición pública, por primera vez en la ciudad, en otoño de 2024.

La presidenta de Fundación Magtel señaló, en el acto de presentación de los efebos en Sevilla, que las esculturas, declaradas Bien de Interés Cultural, “suponen una parte muy significativa del patrimonio andaluz, por origen, época y representación”, y destacó el compromiso de la institución a la que representa con la Junta de Andalucía y el conjunto de la sociedad “al ser uno de los ejemplos con los que procuramos cumplir la labor de responsabilidad social que guía y preside los objetivos y actividades de la Fundación Magtel”.

Por su parte, el consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Arturo Bernal, destacó el minucioso proceso de restauración realizado por un equipo multidisciplinar, que ha empleado innovaciones técnicas nunca antes usadas en la restauración-conservación del patrimonio histórico andaluz, como es el caso de la poliamida 12, un material termoplástico para construir en 3D piezas necesarias para el montaje en vertical de ambas esculturas romanas.

Bernal también señaló que “se ha primado respetar al máximo el original”. Para ello, explicó, “desde el IAPH se ha trabajado en un ambicioso programa de actuaciones enfocadas al conocimiento y la restauración, para conseguir que los efebos nos vayan contando su historia”.

Al acto de presentación asistió el secretario general para la Cultura, José Ángel Vélez, el director general del IAPH, Juan José Primo, la delegada territorial de Turismo, Cultura y Deporte en Sevilla, Carmen Ortiz, y la presidenta de la Fundación Magtel, entidad patrocinadora del programa de I+D y conservación, Auxiliadora López Magdaleno.

Los trabajos específicos de restauración de los efebos andaluces, que han tenido una duración superior a dos años, se han abordado con el objetivo de garantizar su estabilidad y recuperar la integridad formal y estética. Para ello se han frenado los procesos de deterioro, principalmente provocados por la corrosión del metal, y se han incorporado unas innovadoras estructuras internas que han posibilitado unir las diversas partes fragmentadas y anclar las esculturas a sus bases. Así, el resultado permite la contemplación de los Efebos en su verticalidad original.

Una de las novedades de esta solución estructural viene dada por el uso de nuevos materiales, compatibles con el bronce pero nunca antes utilizados en la conservación-restauración de bienes culturales. Es el caso concreto de la poliamida 12, habitual en sectores como la automoción o el aeroespacial, que por primera vez se ha aplicado en el campo patrimonial con los efebos. Se trata de piezas imprescindibles para el montaje en vertical de las esculturas que se han construido con este material por impresión 3D haciendo un vaciado interno tras su digitalización.

El hallazgo de los Efebos Apolíneo y Dionisíaco se produjo en 2012 en una finca cercana a la localidad cordobesa de Pedro Abad. Gracias a una operación de la UDEV (Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Jaén fueron recuperados cuando iban a ser vendidos en el mercado negro. Si bien la existencia de este tipo de estatua de bronce a nivel internacional es muy escasa, el hecho de que los efebos andaluces sean dos y que procedan del mismo contexto supone un descubrimiento realmente excepcional.

Las investigaciones a través de fuentes documentales también han profundizado en las técnicas de fabricación de los efebos de Pedro Abad y en el contexto en que estos bronces fueron creados, expuestos y utilizados. Por otra parte, las técnicas de examen por imagen han constituido un estímulo para saber más de las esculturas y acometer con garantías su conservación. Con imágenes en 3D, realizadas con fotogrametría, se han restituido virtualmente los Efebos, aplicando una vez más la tecnología a la restauración de bienes patrimoniales.

Estas esculturas se ejecutaron con la técnica de la fundición a la cera perdida por método indirecto, un sistema que partía de diferentes piezas o secciones, fundidas en moldes parciales, que posteriormente se unían por soldadura, según señalan las investigaciones de ambas piezas. Metales, mortero y tierras de fundición extraídas del interior han sido analizados con técnicas arqueométricas no invasivas o mínimamente invasivas para la identificación de los materiales. Gracias a que el mortero empleado para fijar los ojos del efebo Apolíneo se ha conservado, de manera excepcional, ha sido posible, por carbono 14, datar su aplicación en torno al año 180 d.C.

El programa de I+D y conservación de los bronces de Pedro Abad, cuya fase de investigación se dará por concluida en diciembre de 2024, ha sido posible gracias a la interacción de un equipo técnico de especialistas del IAPH en conservación-restauración, historia del arte, arqueología, química y examen por imagen, al que se ha sumado una red de colaboraciones externas, con las universidades de Sevilla y Pablo de Olavide, el Centro Nacional de Aceleradores, el Instituto del Patrimonio Cultural de España, el Opificio delle Pietre Dure y el Museo Arqueológico Nacional de Florencia. Todo ello, con el apoyo tecnológico y soluciones de empresas como SGS-Tecnos, Factum Arte, ENNDE Engineering & Design y Patrimoni 2.0.

Este programa ha contado con un presupuesto de 259.409,67 euros desde 2020 a 2024. Del total, 161.095,53 euros han sido aportados por el IAPH, como gastos de personal y seguros, y 98.314,14 euros han sido aportados por la Fundación Magtel, en concepto de patrocinio. A su vez, se han realizado contrataciones de servicios por valor de 92.851,96 euros.