Cada año las enfermedades víricas causan estragos en los cultivos de tomate y cucurbitáceas a nivel mundial, perdiendo unos 3,5 billones de Euros de cosecha tan solo a nivel europeo. El proyecto VIRTIGATION financiado por la UE ha sido lanzado para combatir enfermedades víricas emergentes en tomates, pepinos, melones, calabazas y calabacines.
Las pandemias no solo afectan a la humanidad. Nuevos virus agresivos se están expandiendo en los invernaderos y en los campos de cultivos a lo largo del mundo, amenazando las cifras multi-billonarias que mueven las cadenas de valor del tomate y de las cucurbitáceas. Desde Europa, Marruecos, Israel hasta la India, se están registrando pérdidas importantes de cosecha, que se extienden desde el 15% hasta la destrucción total del cultivo. La emergencia de nuevos y devastadores virus en plantas se ve potenciada por el cambio climático, el incremento de la globalización del mercado y una mayor interconexión de los sectores agrarios.
Soluciones bio-basadas para proteger el tomate y las cucurbitáceas
Hasta la fecha no se encuentran disponibles recursos viables que aborden la destrucción de los cultivos causadas por estas enfermedades en vegetales. A menos que se encuentren soluciones efectivas y medioambientalmente respetuosas para proteger los tomates y cucurbitáceas de enfermedades víricas, el suministro de alimentos de primera necesidad para billones de personas está en riesgo.
En respuesta a esta amenaza global, el Proyecto VIRTIGATION financiado por la UE, tiene como objetivo minimizar las pérdidas de cosecha en tomate y cucurbitáceas, reduciendo las enfermedades víricas en al menos un 80%. Además, VIRTIGATION pretende disminuir en un 50%, o incluso eliminar el uso de productos fitosanitarios en el control de enfermedades víricas emergentes. VIRTIGATION probará tres soluciones biobasadas para proteger las plantas de tomates y cucurbitáceas de enfermedades víricas.
Esto incluirá vacunas para plantas, biopesticidas y la gestion integrada de plagas. El Proyecto VIRTIGATION también implementará nuevos métodos para la detección temprana, la prevención y el control de estas enfermedades. También se desarrollarán herramientas innovadoras de diagnóstico y plataformas de monitoreo online para identificar posibles brotes para “testar, rastrear y hacer el seguimiento” de la propagación de los virus. Con este conjunto de herramientas, se pretende ayudar a toda la cadena de valor, desde los servicios de sanidad vegetal, los agentes políticos, hasta las industrias y los agricultores, protegiendo los tomates y cucurbitáceas de las enfermedades víricas.
Colaboración internacional dirigida por la mundialmente conocida Katholieke Universiteit Leuven -KU Leuven
Así como los grandes retos requieren soluciones globales, VIRTIGATION reúne a algunas de las más renombradas universidades, industrias, organizaciones de investigación y tecnología, servicios de extensión agraria y PYME del mundo. VIRTIGATION involucra a 25 socios de 12 países: Bélgica, España, Luxemburgo, Reino Unido, Italia, Países Bajos, Francia, Alemania, Austria, Israel, Marruecos e India.
El proyecto está coordinado por el Departamento de Biosistemas de la Universidad KU Leuven (Bélgica). El coordinador del proyecto, Hervé Vanderschuren, Catedrático de Horticultura Tropical, describe el objetivo del proyecto:
«En los últimos años, la sociedad ha tomado conciencia de la importancia de desarrollar nuestras capacidades para hacer frente a las pandemias. Las enfermedades víricas no sólo tienen un impacto directo en la salud humana, sino que también pueden socavar la sostenibilidad de nuestros sistemas de producción de alimentos cuando causan importantes pérdidas en las cosechas. Por lo tanto, existe una necesidad apremiante de aumentar nuestros conocimientos y capacidades para aplicar soluciones novedosas y sostenibles, como la implantación de variedades de cultivos resistentes a las enfermedades víricas, el control biológico de los insectos vectores que transmiten las enfermedades víricas, así como el desarrollo de vacunas para evitar que las enfermedades víricas se propaguen rápidamente en las variedades de cultivos susceptibles. El consorcio VIRTIGATION utilizará un enfoque multidisciplinar para desarrollar las soluciones mencionadas, con el fin de reducir el impacto de las enfermedades víricas emergentes en el tomate y las cucurbitáceas».
Participan en VIRTIGATION 4 instituciones de Andalucía y una de Cataluña. Jesús Navas Castillo, investigador del Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea La Mayora UMA-CSIC y uno de los participantes del proyecto VIRTIGATION, señala:
“España es un país en el que la agricultura es un sector de enorme importancia económica, que se ha mantenido activo y rentable para los productores incluso en épocas de crisis económica que eEs especialmente visible en la agricultura intensiva que prolifera en las costas de las provincias orientales de Andalucía como Almería, Granada y Málaga o Murcia. En esta zona, los cultivos de tomate, pimiento y cucurbitáceas como el calabacín, el pepino y el melón, cobran una especial importancia socioeconómica por la gran cantidad de producción que se exporta a otros países europeos y el trabajo que generan. Este proyecto, al tener como objetivo final el control de los daños ocasionados por enfermedades virales que afectan al tomate y las cucurbitáceas, es de enorme importancia para este sector económico.”
El programa VIRTIGATION tendrá una duración de cuatro años (junio 2021 – mayo 2025) y está financiado con 7 millones de euros por el programa europeo Horizonte 2020.