Este acuerdo se enmarca en el proyecto de rehabilitación de uno de los edificios históricos más emblemáticos del skyline sevillano, que abrirá sus puertas en el segundo semestre de 2019 para convertirse en un espacio al servicio del ciudadano. Este edificio, que mantendrá su titularidad pública bajo la gestión de la Fundación Cruzcampo, permitirá a esta entidad sin ánimo de lucro reforzar su oferta formativa, cultural y de impulso al talento joven y al empleo, repercutiendo en beneficio de sevillanos y andaluces.
Como ha destacado el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, “estamos ante un hito de colaboración entre la Administración Pública y la empresa privada que, gracias a la gran apuesta de HEINEKEN por Andalucía y por nuestra ciudad, incrementará el atractivo turístico internacional de Sevilla, contribuyendo a transformación de los distritos de San Pablo-Santa Justa y Nervión y su desarrollo urbanístico. El edificio Palomar es uno de los 30 espacios singulares que forman parte de la estrategia municipal de recuperación y puesta en valor del patrimonio municipal para proyectos de innovación, cultura o empleo de interés general para la ciudad”.
Por su parte, Marcos Tarancón ha señalado: “Este nuevo espacio será un altavoz de la cultura, el talento joven y la innovación en Andalucía, un espacio multifuncional de unos 2.000 m2 en el que se realizarán actividades diversas como exposiciones, eventos culturales, formativos y divulgativos, sesiones de co-working y workshops, entre otras actividades. Vamos a invertir un total de 4 millones de euros en este edificio, recuperando así un lugar emblemático y único, lleno de una historia y herencia de la que estamos muy orgullosos; un templo estrechamente ligado a la historia de HEINEKEN España y de todos los sevillanos”.
Este singular edificio funcionó como bodega de fermentación de La Cruz del Campo entre 1930 y 1970, momento en que pasó a ser utilizado como archivo general de la compañía hasta la venta de los terrenos de la fábrica. El conjunto que incluye “Palomar”, junto al denominado “Mosaico” y las oficinas centrales de la compañía, constituyen parte del patrimonio industrial de la ciudad.
La rehabilitación y apertura de este icónico edificio forma parte del ambicioso proyecto de transformación de la sede de HEINEKEN España para convertirla en un espacio de homenaje a la cerveza y a la innovación, abriendo a la ciudad el verdadero corazón de Cruzcampo. La compañía aspira con ello a convertir un espacio único y ligado a su historia, en epicentro de la cerveza Cruzcampo, a la vez que amplifica su implicación con la sociedad a través de la Fundación Cruzcampo con programas de apoyo a la cultura, el talento y la gastronomía. Con una inversión total de ocho millones de euros, esta iniciativa también contempla la apertura de un espectacular espacio cervecero y gastronómico de 1.400 m2 en otro de los edificios emblemáticos de la antigua fábrica de cervezas, desde el que la marca Cruzcampo mostrará toda su maestría y volverá a elaborar cerveza en el lugar que la vio nacer en 1904.