«Romper barreras, sentirnos acompañadas y que nos entiendan», así define la Asociación Red Nacional de Infértiles los fines de su asociación, un grupo de apoyo formado por y para pacientes que nació de una iniciativa espontánea en las redes sociales y que hoy por hoy agrupa a casi un centenar de asociadas ofreciendo apoyo emocional y asesoramiento de manos de quienes padecen o han padecido infertilidad.
«Normalizar la reproducción asistida en la sociedad no es solo un reto de quienes la viven, sino de todos los que formamos parte de ese proceso. Es nuestra responsabilidad, como Fundación, ofrecer un mayor y mejor conocimiento sobre la infertilidad, de manera que podamos ir derribando los mitos que tanto daño hacen a las pacientes» afirma el Dr. Fernando Sánchez, Presidente de Fundación Ginemed.
Con este objetivo, y con el de estar más cerca de las pacientes, Fundación Ginemed y la Asociación Red Nacional de Infértiles han firmado un acuerdo de colaboración que pondrá en valor la importancia del feedback paciente-médico y viceversa.
Los pacientes han tomado la palabra en las redes sociales y en las Asociaciones de pacientes. Escucharles y facilitar su paso de pasivo a activo, resulta esencial para poder ofrecer, no solo un tratamiento médico adecuado, sino también un abordaje emocional completo.
En este sentido, tanto los expertos como las pacientes, aseguran que la mitificación de la infertilidad en la sociedad afecta gravemente al estado emocional de los pacientes, que padecen comentarios basados en mitos o en la falta de conocimiento sobre la infertilidad. Para combatirlo, Fundación Ginemed informa de la puesta en marcha de iniciativas de comunicación social basadas en ofrecer información de calidad sobre la medina reproductiva.
Información con base científica pero cercana y accesible, como es el caso de la reciente campaña de prevención contra la esterilidad social puesta en marcha junto con la Universidad de Sevilla y que informa de los hábitos que afectan a la fertilidad y que son modificables (retraso de la edad materna, malos hábitos de vida, contacto con tóxicos…).