La Fundación Tecnova cumplió el pasado 9 de enero de 2016 quince años desde su creación. Desde que fuera catalogado como Centro Tecnológico andaluz en 2007, se marcó el objetivo de llegar a ser Centro Tecnológico Nacional y un referente indiscutible en gestión de la I+D+i para las empresas del sector de la Industria Auxiliar de la Agricultura, Postcosecha y Envasado.
Las expectativas del Centro se han visto más que superadas, ya que durante los últimos dos años ha coordinado más de 80 proyectos vinculados con la I+D+i, la transferencia de conocimiento y otros de carácter singular y estratégico para el Centro y el sector hortofrutícola ofreciendo además servicios directos a más de 180 clientes. Asimismo, el Centro Experimental, ha mantenido una ocupación del 100% en todas las campañas agrícolas desde que empezara a funcionar en 2012, entre las ejecuciones de los proyectos de I+D+i y los ensayos y desarrollos tecnológicos realizados en el mismo.
De estos 80 proyectos, Tecnova está trabajando directamente en 9 proyectos internacionales con organismos públicos de I+D+i y entidades privadas perteneciente a Rusia, República de Haití, Italia, España, Marruecos, Bélgica, México, Egipto, Qatar, Francia, etc. Además Tecnova dentro de su estrategia de internacionalización, ha establecido nexos de unión y acuerdos de colaboración con los mejores centros de I+D+i a nivel mundial, entre los que cabe mencionar, Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos ruso, TNO de Holanda, el Centro de investigación Internacional de Agricultura Biosalina (ICBA) de Dubai, CSIC, Universidades españolas, CNTA, Tecnalia, FIA de Chile, Red Innovagro, Universidad de Foggia (Italia), entre otros.
Es por ello que investigadores del Centro están presentes como expertos en los Focus Group sobre “Eficiencia en el Uso de Fertilizantes por Cultivos Hortícolas al Aire Libre” y del Focus Group cuya temática es “Materia Orgánica en Suelos de la Región Mediterránea” creados por la Comisión Europea en Bruselas para asesorar al Consorcio de Innovación Europea Agraria (EIP-AGRI). El objetivo de estos grupos de relevancia es definir futuras líneas y necesidades de investigación para proyectos científicos y de innovación enmarcados dentro de la Estrategia del Horizonte 2020.
En este sentido, es fundamental la labor del equipo multidisciplinar que ha creado el Centro, con un equipo técnico especializado por áreas que alberga 34 personas entre trabajadores y personal de apoyo entre los que se encuentran: 5 doctores en las especialidades de química, biología e ingeniería agronómica, 19 licenciados e ingenieros en las disciplinas de ciencias ambientales, ingeniería agrónoma e ingeniería técnica agrícola, biólogos, bioquímicos, tecnólogos de alimentos, ingeniería química, ingeniería industrial y licenciados en administración y dirección de empresas entre otros y 10 personas de apoyo de tipo administrativo, ensayos de campo , y servicios analíticos.
En palabras del Presidente de Tecnova, Ángel Barranco “Tecnova se ha convertido en un referente como Centro Tecnológico a nivel andaluz y estatal, gracias a todos y cada uno de los que han depositado su confianza en la Fundación, desde los propios patronos, los clientes y empresas del sector, administraciones públicas y privadas, entre otros. Y nuestro objetivo es que se convierta en Centro de referencia mundial para conseguir un sector agroindustrial altamente tecnológico y competitivo a nivel internacional de la mano de sus empresas, sus instalaciones, su equipo humano y su estilo de gestión, alcanzando la excelencia”.
Tecnova se ha marcado para este 2016, continuar con su estrategia de colaboración empresarial a nivel internacional estando cerca de las empresas para ser más competitivos, y apostando por el desarrollo de proyectos de I+D+i dentro de los programas europeos. Actualmente, se está trabajando en líneas vinculadas a la mejora de la tecnología invernada, desde fertilización y nuevas enmiendas orgánicas, modelos predictivos de control climático, hasta tecnología postcosecha mediante desarrollo de bioconservantes para aplicarlos en productos IV Gama, desarrollo de alimentos funcionales, o la aplicación de robótica y visión artificial en cultivos bajo plástico y postcosecha, etc.